Hace 5 años que no venía por esta ciudad. La última vez, fue
con propósito turístico y de visita familiar. Esta vez, no sé si es porque la
razón de mi viaje fue otra, me encontré con una LIMA diferente.
La sentí como una joven que está saliendo de sus años de
rebelde adolescencia y comienza a vislumbrar la adultez. Pero claro, todavía
con algunos vicios de chiquilla…
Entonces, si bien nuevamente la sentí peligrosa en sus calles y por ello
enrejada (ventanas, barrios cerrados con rejas), con mucho contraste social y otras cosas aún por mejorar, la sentí crecida (pero no tan embotellada aún como Buenos Aires), pujante, en
construcción, consumista, internacional (toooodas las marcas de ropa), urbana,
orgullosa de sus raíces y sobre todo de sus sabores. Y no me cabe duda, porque
realmente es una ciudad muuuuy deliciosa! Les aseguro que el objetivo del viaje
lejos estaba de ser gastronómico, pero fue inevitable no caer rendida…
No soy la descubridora de nada. La cocina peruana está considerada
una de las más diversas y ricas (digo por la cantidad diferentes culturas que
la influencian) del mundo. Y esta ciudad ha sido designada la capital
gastronómica de Latino América, de la cual hoy puedo decir que bien
merecidamente.
Es así como mi semana en Lima terminó convirtiéndose en un
trip gastronómico (que realmente los hay, donde se la pasan todo el día
comiendo desde la mañana hasta la noche), casi haciéndome olvidar mi real
objetivo que era…... eh....... ah sí cierto,… trabajar!! Jijiji.
Pero de esto se trata la vida, no? Qué mejor que vivirla, disfrutando de todos los sentidos? Apostar a nuevos proyectos, arriesgarse, jugarse, confiar en los instintos, escuchar el corazón y hacerle caso. Y mientras tanto, disfrutar el camino....
Mi primera introducción a este mundo de nuevos sabores fue a través del gran desayuno
con el que me recibieron mis primos. Totalmente desacostumbrada a comenzar el
día con tanta cantidad de comida!
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Desayuno con mi dulce sobrinita Eyleen. Sandwich de carne y cebolla
desde la mañana temprano!! |
Y luego no paré de probar y deleitarme…
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Inca Kola, infaltable |
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La Lucha Sandwichería del Shoppping Larcomar en Miraflores. Sandwich de Chicharrón (cerdo) |
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Rest. Costa Verde. Con vista al pacífico en el barrio de Miraflores. Buenísimo su buffet (tenedor libre) para poder probar de todo! Y Algarrobina para tomar. |
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Rest Edo en el Jockey Club Plaza. Roll Acevichado, lo más! |
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Rest Segundo Muelle del Barrio de San Isidro. Entrada: Pulpo al olivo sobre galletas de soda. Principal: Ceviche y ensalada de atún (parece carne, pero es pescado!) |
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Jugos de todo tipo de frutas.
El mío de Guanabana |
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Mercado tradicional. Estímulo de aromas, sabores y colores a precios super accesibles. |
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Frutas jamás vistas, todo tan económico! |
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Todo fresco y la mejor atención personalizada del dueño |
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Reunión familiar. Cumple de la tía Olinda. Chifa (comida china estilo peruano) y Ceviche caserito fresco |
No podía volver a casa sin un poco de todo esto... Así que pasé por el super y me armé un "pequeño stock" de sabores...
Uff, qué manera de disfrutar! Ya me está agarrando hambre otra vez!
GRACIAS a toda mi familia que me recibieron como siempre, tan cálida y hospitalariamente. Gracias a ellos, puedo decir que realmente me sentí en casa. Y me dejaron con ganas de volver pronto.... LOVE YOU!!!
SALUD!
:P